El mix que transformó mi vida
Habíamos vivido por muchos años separados y en modo automático, dejando que nuestra inconsciencia reinara, llevándonos al desequilibrio y al extremo de casi pasar a la lista de los 14 mil divorcios que se registran cada año en el Perú.
A punto de divorciarme
decidí darme un respiro y meditar. Mis prácticas me llevaron a estar más
conectada con mi ser y con los demás, en consciencia plena, reconociendo mis
sentimientos y pensamientos, haciéndome más responsable de los impactos y del
liderazgo de mis palabras, actos y decisiones pasadas, presentes y futuras.
Me escuché más y entendí
que realmente no me quería divorciar –por más que lo había gritado a los siete
mares--, porque en el fondo, muy en el fondo de mi ser seguía amando a mi
esposo y quería que mis hijos, él y yo vivamos juntos en un hogar sano y con actitud feliz, sobre todo porque mis niños se lo merecen. Comprendí
que mi propósito de vida es mi familia pero para lograrlo debía trabajar en
ello cada día de mi existencia, meditando antes mis palabras y acciones.
Así que, reconociendo mi
experiencia y conocimientos de estratega de comunicación tracé mi propio plan
de vida comunicacional, reaprendiendo a escuchar y a comunicarme mejor con los
que más amo y tomando en cuenta las enseñanzas de todos mis maestros de vida. Intensifiqué mis prácticas de respiración,
meditación, oración, retiros holísticos, contacto con la naturaleza, sumando a
ello diversas técnicas y herramientas de la comunicación intrapersonal,
interpersonal, organizacional y externa. Y ello conllevó a practicar una
comunicación consciente, positiva, íntegra, integradora y transformadora.
Comencé a dar en lugar de
pedir, sin juzgar, reaprendiendo a perdonarme y perdonar dejando atrás el
pasado y viviendo más el presente, tomando en cuenta las sugerencias de mis
maestros de vida y de meditación, procurando generar confianza, unidad y
motivación. Y así inicié el proceso de reconstrucción de nuestra familia, sin
hacer ningún aspaviento y sin contarle a nadie pues, como es obvio, tenía miedo
al fracaso.
No fue fácil, pero después
de varios meses del proceso de reconstrucción ¡lo logramos! Y, entonces
comprobé en carne propia que el mix respiración, meditación, contacto con la
naturaleza, más las técnicas de comunicación holística estratégica sí traen bienestar,
paz, unión y resultados felices para todos, pero siempre y cuando se practiquen
a diario y disciplinadamente, asimilando nuevos conocimientos, experiencias y
resiliencias.
Y por supuesto, si eres
creyente, todo esto se vuelve más potente y purificador con la oración diaria y
en familia. Y al respecto, les confieso que mi esposo es ateo –o lo era—pues de
tanto decirle “Bendiciones mi amor”, ahora él siempre me despierta y se despide
antes de ir al trabajo dándome su bendición. Con lo cual me inicia y completa
el día de la mejor manera, regalándome energía y comunicación positiva.
Es por esto que decidí
crear Conectados Global Media, para seguir en la práctica disciplinada de este
mix que transformó mi vida y compartir lo aprendido –con total humildad— con el propósito de ayudar a las personas, familias, equipos, organizaciones
a comunicarse mejor de manera consciente, positiva, íntegra, integradora y
transformadora, para desarrollar relaciones sanas y duraderas, con resultados
felices para todos.
Pero repito, no es fácil.
Implica mucha perseverancia para desconectarnos del pasado doloroso, de nuestras malas prácticas y así conectarnos con lo bueno aprendido y viviendo más en presente compartiendo una
comunicación positiva, que es esa energía maravillosa que une y
transforma. Les deseo paz y amor. Que así. ¡Gracias y bendiciones!
Guisella Vargas Ochoa
CEO de Conectados Global Media
http://conectadosglobalmedia.pe
Guisella Vargas Ochoa
CEO de Conectados Global Media
http://conectadosglobalmedia.pe
Comentarios
Publicar un comentario